El Bono de alquiler social ampliará su duración de 2 a 3 años y sus beneficiarios con 5 millones de euros

Las ayudas contra la pobreza energética se extienden también al gas natural

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, avanzó el pasado 29 de diciembre en la rueda de prensa del Consello una aportación de 5 millones de euros para las ayudas del Bono de alquiler social que ampliará su duración de dos a tres años y ampliará también sus beneficiarios.

En lo que respecta a la cuantía, Feijóo precisó que con esta inversión, los beneficiarios podrán seguir teniendo una ayuda mensual de hasta 200 euros, que podrá incrementarse hasta un 20% en caso de que las personas arrendatarias sean integrantes de una familia numerosa o de una unidad de convivencia donde necesiten una vivienda adaptada para alguno de sus miembros.

A esta cantidad se suma también una ayuda única de 600 euros para los gastos derivados de la formalización de nuevos contratos de alquiler o para el pago de retrasos en el caso de permanecer en la vivienda objeto del procedimiento judicial de desahucio.

Además, Feijóo subrayó que hay dos nuevos colectivos susceptibles de beneficiarse del Bono de alquiler social: los arrendatarios de viviendas de promoción pública propiedad de la Xunta cuya vigencia del contrato finalizara después de la entrada en vigor de esta orden; y personas a las que, por concurrir circunstancias de emergencia social y no conseguir los ingresos necesarios establecidos en el Programa de viviendas vacías, la comisión de seguimiento del programa les proponga la adjudicación de una vivienda.

El presidente gallego concluyó recordando que el Bono alquiler social se enmarca en las 12 medidas adoptadas por la Xunta frente a los desahucios y en defensa del derecho a la vivienda. No en vano, al amparo de estas iniciativas ya se atendieron a más de 1.100 familias, entre las que se encuentran las 248 a las que ya se les concedió el Bono de Alquiler Social.

Por otro lado, Núñez Feijóo avanzó la ampliación al gas natural de las ayudas contra la pobreza energética y afirmó que cuando alguna de las familias vulnerables esté en riesgo de sufrir un corte de luz o gas, se activará un protocolo de urgencia según el que, si la familia interesada presenta la solicitud de ayuda ante la Xunta, la Administración solicitará a la compañía que paralice el corte de suministro durante un mes.

Esta ayuda se pone en marcha a través de un protocolo de colaboración único con las empresas comercializadoras: Gas Natural-Fenosa, Endesa, Iberdrola, EDP, CHC y Viesgo. A estas compañías se irán sumando, al igual que el año pasado, las comercializadoras del mercado libre que lo deseen.

Feijóo subrayó que la lucha contra la pobreza energética es un objetivo de la Xunta y recuerda que desde 2014 se concedieron ya 4.955 ayudas del ticket eléctrico social; mientras que este año hubo 1.051 familias que evitaron un corte de luz con las ayudas de emergencia.