Miranda subraya que atender a la colectividad en Cuba es “reforzar uno de los vínculos más antiguos con la Galicia exterior”

El secretario xeral da Emigración participó en Santiago en la conferencia “A Habana Galega” organizada por el Consello da Cultura Galega

Yahima Martínez Millán, Rosario Álvarez, Antonio Rodríguez Miranda y María Xosé Porteiro.
Público asistente a la primera jornada del Congreso.
Un momento de la jornada.
La cónsul general de Cuba en Galicia, Yahima Martínez Millán, siguió con atención las ponencias.

El secretario xeral da Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, participó el jueves 7 de noviembre en el acto de inauguración del congreso “A Habana Galega”, promovido por el Consello da Cultura Galega (CCG) en el marco de los actos conmemorativos del 500 aniversario de la fundación de la ciudad de La Habana. Un escenario en el que el titular del departamento autonómico hizo hincapié en la historia de la emigración gallega a Cuba como “fiel reflejo de los fuertes lazos que desde hace siglos unen estrechamente ambas tierras”.

Así, durante el acto -que se celebró en la sede del CCG y que contó con la participación de la propia presidenta del Consello, Rosario Álvarez, de la vocal de este órgano y cocordinadora del congreso, María Xosé Porteiro, y de la cónsul general de Cuba en Galicia, Yahima Martínez Millán-, Miranda profundizó en la historia de la emigración gallega en la Isla. Una historia que se manifiesta hoy en día en los más de 43.000 gallegos que viven en Cuba, la mayoría de ellos, descendientes de emigrantes que nacieron ya en aquel país.

“Como bien dijo Neira Vilas, sin el relato de la diáspora, nuestra historia estaría dañada. Hace décadas, la emigración gallega se abrió paso como un camino hacia una vida mejor. Y en muchos casos, ese camino llegó a Cuba, haciendo de La Habana uno de los lugares más transcendentes del galleguismo. Y nosotros ni podemos ni queremos olvidarlo”, destacó Miranda, quien recordó que, entre otros hitos, en La Habana se cantó por primera vez el himno gallego, se izó nuestra bandera o surgió la Real Academia a comienzos del siglo XX.

“Pero más allá de los símbolos, Galicia guarda con Cuba una inmensa deuda cultural e infinidad de lazos, como bien podemos comprobar en esta jornada”, prosiguió el secretario xeral, quien apuntó algunos de aquellos “lugares que simbolizan la presencia gallega en La Habana”: el antiguo Centro Gallego de La Habana (hoy, Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso), los teatros de Payret y Fausto, los hospitales Hijas de Galicia y La Benéfica, el Instituto de Literatura Lingüística, o la Sociedad Cultural de Rosalía de Castro.

Unos hitos que ponen en valor la “estrecha relación entre Cuba y Galicia, que llega hasta nuestros días a través de esos miles de gallegos que siguen desarrollando sus historias y proyectos personales en la Isla”. Por este motivo, destacó Miranda, “cuidar nuestra colectividad cubana no es sino reforzar uno de nuestros vínculos más antiguos con la Galicia exterior”.

El secretario xeral contó como anécdota la “casualidad” de que esa misma mañana, cuando llegó a su despacho, se encontró con un certificado de nacimiento -que llevaba encima y enseñó al público- de una mujer que nació en 1926 en la Casa de Salud de las Hijas de Galicia en La Habana, “una prueba fehaciente” de la conexión entre los dos territorios y de la labor de las instituciones que los gallegos crearon en Cuba para atender las necesidades del colectivo emigrante.

La contribución de Cuba a la Galicia contemporánea

Por su parte, Rosario Álvarez destacó la “contribución de Cuba a la Galicia contemporánea”, recordando que “muchos de los símbolos gallegos fueron donados por la emigración gallega en ese país, que en Cuba “floreció de una manera singular el asociacionismo gallego”, que desde la Isla recibió un gran “impulso” la lengua y la literatura gallegas y que fueron las remesas de muchos gallegos allí afincados las que permitieron desarrollar “la red de escuelas de indianos que permitió que muchas áreas rurales contaran con instrucción pública por primera vez”.

María Xosé Porteiro subrayó que “Cuba está dentro del alma del pueblo gallego”, hasta el punto de que muchas localidades tienen actos dedicados a ella dentro de sus fiestas patronales.

Y la cónsul de Cuba recordó que con el congreso se iba “a celebrar un cumpleaños” -el 500 aniversario de La Habana- y afirmó que “los cubanos no podemos entendernos sin mirar a Galicia, y viceversa”.

En el marco de la celebración de estos 500 años de la fundación de la ciudad de La Habana, el Museo do Pobo Galego acoge la exposición “O soño cubano da emigración galega”. Esta muestra, impulsada también por el Consello da Cultura Galega en colaboración con la Secretaría Xeral, es un fiel retrato de las inquietudes y aspiraciones de los gallegos emigrantes que llegaron a la Isla desde finales del siglo XIX.

 

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