Dos familias de emigrantes gallegos se salvan del incendio de la Torre Grenfell en Londres

Por ahora hay 30 fallecidos, 78 heridos y decenas de desaparecidos

La Torre Grenfell de Londres en llamas.

Entre los aproximadamente 500 vecinos que se alojaban en la Torre Grenfell, que ardió la noche del 13 al 14 de junio, vivían desde hace años al menos dos familias gallegas, que afortunadamente salvaron su vida pero lo perdieron todo sus pertenencias, recuerdos, fotos.

Son Dorinda Suárez, de Malpica, su marido José Costa, de Carballo, y el hijo de ambos, Iván Costa, así como el matrimonio formado por Carmen Sánchez (Sada) y José Vieiro (Lorbé), cuya hija Vanessa no estaba en casa cuando sucedió la tragedia.

Consciente de haber sobrevivido a un drama “que no tengo palabras para describir”, Dorinda Suárez explicó a La Voz de Galicia que estaban en cama cuando llamaron a la puerta de su casa, situada en la planta 13 de la Torre Grenfell. Era un vecino portugués que regresaba de llevar a una prima al aeropuerto: “Cuando llegó abalo se encontró con los bomberos y les dijo que tenía que subir” para avisar a sus familiares, pero aprovechó también para llamar a las puertas de otros vecinos. “Gracias a él estamos aquí, otra gente tuvo mucha menos suerte”, relata Dorinda Suárez. Quedaba uno de los dos ascensores del edificio operativo, pero ella, su marido y su hijo bajaron por las escaleras. Dorinda, José e Iván tienen casa en Carballo, donde pasan sus vacaciones.

En una entrevista concedida a la Cadena Cope el jueves 15 de junio, Dorinda Suárez también afirmó «no saber nada» de una canaria y su hija que vivían en la torre. Además, confirmó la presencia en el edificio de una mujer de Ferrol que «está hospitalizada».

Carmen Sánchez explicó que “dormíamos, era la una y cinco de la mañana”, cuando llamaron a su puerta, en el piso de la séptima planta donde vive con su marido José Vieiro y su hija Vanessa, quien en ese momento no estaba en casa. Eran los otros gallegos, Dorinda y su familia, que pararon para alertarles cuando escapaban de las llamas. “Cuando nos levantamos y fuimos al salón ya vimos la cocina en llamas, cerramos la puerta y salimos”. En el pasillo de esa planta se encontraron a los bomberos y a otros vecinos, que también consiguieron salvarse bajando también por las escaleras. Carmen y José tienen una vivienda en la localidad de Santa Cruz, en el municipio coruñés de Oleiros, donde veranean.