Los trabajadores de la Embajada de España en Estocolmo inician una huelga indefinida el martes 13 de junio

Afecta a los empleados del Consulado General y Residencia de la Embajada española, la Oficina Económica y Comercial, la Oficina de Turismo y el Instituto Cervantes

Los trabajadores de la Embajada de España en Estocolmo se suman a los compañeros de Argentina y han convocado una huelga indefinida a partir del día 13 de junio de 2017. Esta huelga afecta a los empleados del Consulado General y Residencia de la Embajada española, la Oficina Económica y Comercial, la Oficina de Turismo y el Instituto Cervantes.

Un año después de la convocatoria de una huelga de dos días, la Administración española no se ha pronunciado sobre la situación de sus trabajadores en Suecia. Por este motivo, los empleados de estas oficinas protestan de nuevo por una pérdida de poder adquisitivo mínimo del 33% desde la última subida salarial en 2008: casi diez años de congelación salarial.

Los salarios no han evolucionado conforme a la carestía del país, uno de los más caros del mundo y con un nivel de impuestos aplicados al salario de entre un 30-32%. Algunas familias se encuentran por debajo del umbral de pobreza debido a la alta carestía de vida y en muchos casos no consiguen llegar a final de mes, viéndose abocadas al pluriempleo o a recurrir a ayudas de la seguridad social sueca, señalan desde UGT Exterior.

A pesar de varias huelgas del personal afectado, “el Gobierno Español hace oídos sordos y sigue negándose a compensar esta gran pérdida de masa salarial. Esto va en contra de la ley española de Presupuestos Generales del Estado, en la cual se establece que ‘el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas determinará y, en su caso actualizará las retribuciones del personal laboral en el exterior de acuerdo con las circunstancias específicas de cada país’”, señalan desde el sindicato. Las condiciones de trabajo y los salarios existentes en cada país es lo que la Administración Española tiene que tener en consideración para remunerar a sus empleados. Cosa que tienen en cuenta a la hora de fijar los módulos de complementos de destino de su personal funcionario y diplomático, que se revisan anualmente teniendo en cuenta la carestía de vida en Suecia, añaden.

Los sueldos del personal local de la Administración Española en Suecia están muy por debajo del salario medio local y la Embajada española es la peor pagada de todas las embajadas europeas en Suecia. UGT y el sindicato sueco Unionen han solicitado (en repetidas ocasiones) que los salarios se ajusten y sean similares a los pagados al personal local de este país y se deje de discriminar a este colectivo. Además, se exige un sistema como el implementado en el mercado laboral sueco y por el que cada año aumentan los salarios de los trabajadores según la evolución de la carestía de vida del país y el IPC, y así evitar volver a crear una situación similar como la que se está viviendo actualmente.

Desde UGT se exige una acción inmediata para solucionar una situación inaceptable y la convocatoria urgente de la Comisión Técnica dependiente del Ministerio de Hacienda y Función Pública para que se aprueben las subidas salariales dignas que se reclaman, con efectos retroactivos desde el 1 de enero.

“Se ha llegado infelizmente a un punto en el que hay que reaccionar y no quedar pasivos viendo como los fondos del Gobierno español se dedican a pagar los salarios de los funcionarios de alto rango, mientras que a los contratados en el exterior se les niega un salario digno y razonable. Además, la Administración insiste en violar las leyes laborales suecas, a pesar de haber sentencias judiciales condenatorias”, añaden desde UGT.

Para el sindicato esta situación es consecuencia directa de la carencia de leyes que regulen las condiciones de trabajo de este personal que carece de un convenio laboral, tanto en Suecia como en España, y la necesidad de una negociación colectiva.

“Reiteramos que las exigencias solicitadas son básicamente un salario justo y equiparable al salario que se percibe para trabajos similares en Suecia y unas condiciones laborales que respeten las leyes suecas, al ser trabajadores locales”, insisten desde UGT.