El embajador Roberto Varela recibió varios homenajes de entidades gallegas en Montevideo

Con motivo de su despedida se celebraron sendos actos en el Centro Ourensán y en el Patronato da Cultura Galega

El embajador Roberto Varela, tercero izquierda, con los directivos del Centro Ourensán.
José María García cantando.

El embajador español en Uruguay, Roberto Varela Fariña, recibió varios homenajes en los clubes de la colectividad gallega de Montevideo en el que ha sido seguramente su último fin de año en este cargo.

El periplo de despedida de su misión diplomática al frente de la Embajada española en Uruguay por parte del pontevedrés Roberto Varela Fariña continuó luego que todos los clubes asociados a la Federación de Instituciones Españolas le entregaran el Premio Colón especial 2016.

El pasado 22 de diciembre fue el Centro Ourensán y la dirección del Primer Museo Gallego del Uruguay, que está instalado en la institución que dirige Xurxo Vázquez. A Varela le acompañó el cónsul general, Manuel Fairén, y el adjunto, Juan Lugo, así como también el jefe de la Consejería de Empleo y Seguridad Social, José Martín. En tanto fue arropado por directivos de la entidad organizadora y por los presidentes de todas las instituciones gallegas agrupadas en la Federación.

El embajador Varela afirmó que “pensé venía a inaugurar un museo y resulta que me iban a realizar un homenaje a mí en el museo”, asegurando que “no pensé ni un momento en dejar de venir aquí a pesar de otro compromiso que tenía” porque “me siento mejor aquí junto a ustedes que en cualquier otro lado”.

Con esta reflexión define el sentimiento del embajador que ha cautivado a la colectividad española en Uruguay, y en especial a la gallega. Todos han destacado la fraternidad y humildad de este diplomático que está acabando sus más de cuatro años al frente de la Embajada española en el país.

El presidente ourensán, Xurxo Vázquez, agradeció su gestión ofreciéndole como recuerdo una placa, así como también lo hizo el propietario de las piezas del museo gallego allí instalado, el bergantiñán José María García, recordando que “esta plaqueta se la entrega el primer museo gallego en el Uruguay al primer embajador gallego español que tuvimos en esta tierra de acogida”. La celebración fue coronada por el músico Roque Cocina quién acompañó a José María García en varias interpretaciones que hicieron recorrer la morriña de los emigrantes gallegos y su propia vida como al interpretar la canción ‘Zapatero remendón’.

Al día siguiente fue el Patronato da Cultura Galega la entidad que homenajeó al embajador Varela como socio de honor de la institución, que celebraba esa jornada la visita del ‘apalpador’ que también tocó la ‘barriguiña’ del pontevedrés y le dejó su regalo.

Si bien estos homenajes tienen el sabor de la despedida, el embajador regresará a Montevideo tras pasar las fiestas navideñas en España, donde aguardará la resolución del Ministerio de Asuntos Exteriores con su nuevo destino. Al mismo tiempo también se aguarda el relevo del consejero de Empleo y Seguridad Social en Uruguay, Andrés González Murga.